Publicado el marzo 15, 2024

La diferenciación real en España no es un eslogan, sino la arquitectura invisible de su negocio que hace que elegirle sea la única opción lógica.

  • Su propuesta de valor debe ser tan clara que un cliente la entienda en menos de 10 segundos, resolviendo una frustración específica.
  • Copiar al líder del mercado es una trampa que le convierte en una versión inferior y, a menudo, más cara a ojos del cliente.

Recomendación: Empiece por mapear su modelo de negocio con el Lienzo de Propuesta de Valor para identificar sus verdaderas fortalezas defendibles.

En un mercado español cada vez más saturado, la pregunta resuena en la mente de miles de empresarios: «Si ofrezco un producto o servicio de calidad, ¿por qué los clientes potenciales acaban eligiendo a la competencia o, peor aún, regateando hasta el último céntimo?». La respuesta habitual suele girar en torno a «ofrecer un mejor servicio» o «encontrar un nicho», consejos tan genéricos que han perdido todo su significado. La sensación de ser invisible, una opción más en un mar de alternativas casi idénticas, es una de las mayores frustraciones para cualquier negocio que busca crecer de forma sostenible.

Muchos intentan resolverlo con tácticas a corto plazo: una bajada de precios, una promoción agresiva o la imitación de las estrategias del líder del sector. Sin embargo, estas acciones solo erosionan los márgenes y refuerzan la percepción de que su oferta es una mercancía intercambiable. Pero, ¿y si el problema no estuviera en su fachada, sino en sus cimientos? ¿Y si la verdadera clave no fuera gritar más alto, sino construir una arquitectura de valor tan coherente y sólida que la elección de su empresa se vuelva la única opción lógica para un tipo de cliente muy específico?

Este artículo no es una lista de trucos de marketing. Es una guía estratégica para deconstruir y reconstruir su posicionamiento competitivo en el contexto español. Exploraremos cómo diagnosticar su falta de diferenciación, cómo diseñar una propuesta de valor a prueba de balas con herramientas probadas, y cómo validar sus nuevas hipótesis sin arruinarse en el intento. Es hora de dejar de competir y empezar a dominar su categoría.

Para guiarle en este proceso de transformación estratégica, hemos estructurado el contenido en pasos lógicos que le llevarán desde el diagnóstico inicial hasta la ejecución práctica. A continuación, encontrará el mapa de ruta de este artículo.

Sumario: Cómo construir su ventaja competitiva única en España

¿Por qué tus clientes no entienden qué te hace diferente de tu competencia en 10 segundos?

La causa principal de la invisibilidad comercial es la niebla comunicativa. Su cliente potencial, bombardeado por miles de mensajes diarios, no tiene tiempo ni energía para descifrar un lenguaje corporativo vago o promesas genéricas como «calidad y servicio». Si en los primeros diez segundos de contacto —ya sea en su web, un folleto o una conversación— no es capaz de articular mentalmente «Ah, esto es para mí porque resuelve [problema específico] de una forma [única]», le ha perdido para siempre. Esta falta de claridad es un síntoma de una propuesta de valor débil o mal comunicada, un problema que afecta incluso a grandes corporaciones.

Pensemos en el sector bancario español. Muchos bancos tradicionales sufren de una comunicación homogénea y confusa, lo que se refleja directamente en la opinión de sus usuarios. No es casualidad que en una encuesta de la OCU con 28.000 usuarios, la satisfacción general con entidades como Unicaja Banco fuera de tan solo 51 sobre 100 puntos. Sus mensajes sobre «solvencia» o «proximidad» no logran conectar con las frustraciones reales del cliente moderno: comisiones ocultas, burocracia y falta de agilidad.

El contraste se hace evidente al observar el sector del asesoramiento financiero. En este campo, podemos ver un ejemplo claro de cómo la falta de concreción penaliza.

Estudio de caso: Claridad vs. jerga en el asesoramiento financiero español

Un robo-advisor como Indexa Capital A.V., S.A., comunica su propuesta de valor de forma inmediata y tangible: «inversión automatizada con bajas comisiones». En menos de 10 segundos, un inversor entiende el beneficio: tecnología para invertir de forma sencilla y más barata. En cambio, muchas Empresas de Asesoramiento Financiero (EAFI) tradicionales siguen usando términos como «gestión patrimonial integral» o «soluciones financieras a medida». Esta jerga técnica, aunque precisa, no comunica un beneficio claro y genera una barrera de entrada para el cliente, que no sabe si esa «integralidad» resolverá su problema de planificación de la jubilación o si simplemente es una forma elegante de venderle productos complejos.

El problema, por tanto, no es que su negocio no tenga valor, sino que ese valor está oculto tras un lenguaje que no resuena con las «tareas», «frustraciones» y «alegrías» de su cliente ideal. Para ser memorable, primero debe ser comprensible. La diferenciación empieza por una claridad radical.

¿Cómo crear tu propuesta de valor en 3 horas usando el lienzo de Alexander Osterwalder?

Una vez diagnosticada la falta de claridad, necesita una herramienta para construirla. El Lienzo de Propuesta de Valor de Alexander Osterwalder no es un ejercicio académico, sino un mapa estratégico que le obliga a ponerse en los zapatos de su cliente. Es la forma más rápida y eficaz de pasar de la intuición a una hipótesis de valor validable. El proceso consiste en rellenar dos grandes bloques: el perfil del cliente (derecha) y el mapa de valor (izquierda), asegurándose de que ambos encajen como piezas de un puzle.

El objetivo no es crear un documento perfecto, sino un prototipo de su mensaje. Dedique una sesión intensiva de 3 horas, sin distracciones, para completar cada apartado con la mayor honestidad posible. Este ejercicio desvela las desconexiones entre lo que usted cree que ofrece y lo que su cliente realmente necesita. A menudo, descubrirá que está ofreciendo «analgésicos» para dolores que su cliente no considera prioritarios, o «vitaminas» que no generan un deseo de compra real.

Lienzo de propuesta de valor para asesor financiero especializado

A continuación, se detallan los pasos clave para aplicar este lienzo, usando como ejemplo un asesor financiero que busca especializarse en un nicho concreto en España:

  1. Defina su segmento de clientes: Sea hiper-específico. No es «empresarios», sino «autónomos societarios de 45-55 años con un patrimonio superior a 500.000€ en la Comunidad de Madrid».
  2. Identifique los ‘trabajos’ del cliente: ¿Qué intentan conseguir? Ejemplos: planificar una jubilación cómoda, optimizar la carga fiscal de su empresa, proteger el patrimonio familiar frente a la inflación.
  3. Mapee las frustraciones (Pains): ¿Qué les molesta? La falta de transparencia de su banco tradicional, productos de inversión caros y complejos, o la jerga financiera incomprensible que les hace sentir inseguros.
  4. Liste las ganancias deseadas (Gains): ¿Cuál es su definición de éxito? Tranquilidad financiera, obtener una rentabilidad justa y ajustada a su riesgo, y tener un asesor accesible que responda al teléfono.
  5. Diseñe sus ‘analgésicos’ y ‘creadores de alegrías’: Ahora, y solo ahora, defina cómo sus servicios alivian esas frustraciones y generan esas ganancias. Ejemplo: un modelo de honorarios transparente (fee-only) y reuniones trimestrales proactivas con informes en lenguaje llano.
  6. Articule su Propuesta de Valor: Conecte los puntos en una frase. «Ayudo a autónomos societarios a alcanzar la tranquilidad financiera mediante un plan de inversión 100% transparente y accesible, liberándoles de la complejidad y los costes ocultos de la banca tradicional.»

Este lienzo es su primer plano para construir la arquitectura de valor. Es un documento vivo que deberá ser validado, pero ahora tiene una brújula clara que guiará todas sus decisiones de negocio.

¿Diferenciarte por innovación, atención o coste: cuál funciona en tu sector en España?

Con una propuesta de valor en borrador, la siguiente pregunta estratégica es: ¿sobre qué pilar fundamental construiré mi ventaja competitiva? Michael Porter definió tres estrategias genéricas: liderazgo en costes, diferenciación (por producto/servicio) e enfoque (nicho). En el contexto actual español, podemos adaptarlas a tres ejes claros: innovación (tecnología, modelo de negocio), atención al cliente (personalización, experiencia) o coste (eficiencia, precio bajo). Elegir el eje incorrecto para su sector puede ser fatal.

Competir exclusivamente en coste es una trampa para la mayoría de las pymes y autónomos. Requiere una escala masiva y una obsesión por la eficiencia que es difícil de sostener. En servicios profesionales, un precio bajo a menudo se asocia con baja calidad o desesperación. La innovación es atractiva, pero puede requerir grandes inversiones y un ciclo de desarrollo largo. La atención y personalización, sin embargo, es a menudo la ventaja más defendible para un actor pequeño o mediano, especialmente en sectores donde los grandes líderes han deshumanizado el servicio.

Un estudio de satisfacción bancaria de la OCU de 2025 reveló que entidades pequeñas y locales como Caixa Guissona obtienen 84 sobre 100 puntos en satisfacción, frente a los 63 puntos de promedio de los grandes bancos. Su ventaja no es tecnológica ni de precio, sino de proximidad y trato personalizado. Esto demuestra que en mercados comoditizados, la experiencia del cliente es un campo de batalla donde los pequeños pueden ganar.

Para tomar una decisión informada, es útil analizar cómo se posicionan los diferentes actores en su sector. Tomemos de nuevo el ejemplo de los servicios financieros en España.

Comparación de estrategias de diferenciación en servicios financieros España
Estrategia Asesor Independiente Banca Tradicional FinTech/Neobancos
Innovación Media (herramientas digitales) Baja (sistemas legacy) Alta (tecnología disruptiva)
Atención personalizada Muy Alta (1 a 1) Baja (masificada) Media (chatbots + humano)
Transparencia costes Alta (fee-only) Baja (comisiones ocultas) Alta (modelos simples)
Acceso productos Amplio (multi-entidad) Limitado (productos propios) Medio (partnerships)

Este análisis demuestra que un asesor independiente no puede competir en innovación pura contra una FinTech, ni en escala de costes contra un gran banco. Su ventaja competitiva natural y defendible reside en la atención ultra-personalizada y la transparencia de costes, dos áreas donde los gigantes del sector son estructuralmente débiles. Su elección estratégica debe basarse en una evaluación honesta de sus recursos y del panorama competitivo, no en lo que parece más glamuroso.

La trampa del competidor: imitar al líder y terminar siendo una versión inferior y más cara

Uno de los impulsos más peligrosos en estrategia es observar al líder del mercado y pensar: «Haré lo mismo, pero un poco más barato» o «con un toque personal». Esta estrategia de imitación, conocida como «me-too», es un camino directo a la irrelevancia. Al copiar las características, el mensaje y el modelo del líder, usted se posiciona automáticamente como una alternativa secundaria. El cliente, al ver dos opciones similares, casi siempre elegirá la marca original y establecida, a menos que su precio sea drásticamente inferior, lo que nos devuelve a la destructiva guerra de precios.

El problema fundamental es que el líder ha construido toda su arquitectura de negocio para soportar su posicionamiento. Su estructura de costes, su cadena de suministro, su marca y sus procesos están optimizados para ser lo que son. Al intentar imitar su fachada sin tener sus cimientos, el resultado es siempre una versión menos eficiente y, paradójicamente, más cara en relación al valor percibido. En lugar de ser el «Rolex asequible», se convierte en una imitación cara.

La solución estratégica no es la imitación, sino el contra-posicionamiento. Consiste en identificar los compromisos que el líder ha tenido que hacer para alcanzar su posición y construir su negocio en torno a lo que ellos, por su propia naturaleza, no pueden o no quieren ofrecer. Como señala el blog especializado Finanfox en un análisis sobre asesores financieros independientes vs bancarios:

Como el asesor independiente puede trabajar con muchos más productos financieros que un asesor bancario, le puede ofrecer al cliente una cartera verdaderamente personalizada, no un producto estándar disfrazado.

– Blog Finanfox, Análisis sobre asesores financieros independientes vs bancarios

Esta cita ilustra perfectamente el contra-posicionamiento. El gran banco está comprometido con vender sus propios productos. Es su modelo de negocio. El asesor independiente se posiciona precisamente en esa debilidad estructural: la falta de independencia.

Estudio de caso: El contra-posicionamiento de DEGIRO en España

DEGIRO no intentó ser un «banco de inversión mejor». Conquistó el mercado español de inversores particulares haciendo exactamente lo contrario a la banca privada tradicional. Donde los bancos ofrecían oficinas lujosas y gestores personales, DEGIRO ofrecía una plataforma 100% digital. Donde los bancos cobraban altas comisiones (ej. 20€ por operación) para justificar su servicio, DEGIRO ofrecía tarifas ultra-bajas (ej. 2€). Su estrategia de «menos es más» atrajo a un segmento de clientes (jóvenes, autónomos, digitales) que valoraban la transparencia y el bajo coste por encima del servicio personalizado tradicional que nunca sintieron que fuera para ellos.

En lugar de preguntarse «¿Cómo puedo ser como mi competencia?», la pregunta correcta es «¿Qué frustración del cliente está mi competencia ignorando o generando debido a su propio modelo de negocio?». Ahí es donde reside su oportunidad.

¿Cómo cambiar tu posicionamiento sin perder clientes actuales ni generar desconfianza?

Definir un nuevo y afilado posicionamiento es emocionante, pero también aterrador. La principal preocupación es: «¿Qué pasará con mis clientes actuales? ¿Pensarán que ya no soy para ellos? ¿Perderé ingresos durante la transición?». Este miedo es legítimo y, si no se gestiona correctamente, puede paralizar la evolución del negocio. La clave no es un cambio brusco y silencioso, sino una transición orquestada y comunicada, donde sus mejores clientes se sientan los protagonistas del cambio, no las víctimas.

El error más común es cambiar la web y los servicios de la noche a la mañana, esperando que todo el mundo lo entienda. Esto genera confusión y desconfianza. Una transición exitosa se parece más a una evolución que a una revolución. Debe empezar por dentro, con sus clientes más fieles y valiosos. Ellos deben ser los primeros en saberlo, entender el «porqué» del cambio y percibir los beneficios directos para ellos. Al hacerlo, no solo mitiga el riesgo de fuga, sino que los convierte en embajadores de su nuevo posicionamiento.

Proceso de transición estratégica en asesoramiento financiero

Un plan de comunicación por fases es esencial. Imaginemos de nuevo a nuestro asesor financiero, que ha decidido especializarse en inversión socialmente responsable (ESG). Su plan de transición podría ser el siguiente:

  1. Fase 1 (Semanas 1-2): Comunicación VIP. Realizar llamadas personales al 20% de sus clientes más importantes. Explicarles la nueva especialización no como un abandono de lo anterior, sino como una mejora: «Para ofreceros un valor aún mayor y alinear las inversiones con vuestros valores, he decidido especializarme en… Esto nos permitirá…».
  2. Fase 2 (Semana 3): Anuncio Segmentado. Enviar un email personalizado al resto de clientes, idealmente con un vídeo corto y cercano. El mensaje debe reforzar el compromiso: «Mi compromiso contigo sigue intacto. Esta especialización significa que ahora tendré acceso a mejores herramientas para…».
  3. Fase 3 (Semana 4): Demostración de Valor. Organizar un webinar exclusivo para clientes actuales mostrando las nuevas capacidades, herramientas o los beneficios tangibles del nuevo enfoque.
  4. Fase 4 (Semanas 5-6): Actualización Gradual. Empezar a actualizar los perfiles públicos (LinkedIn, web) para reflejar el nuevo posicionamiento. El cambio no será una sorpresa, sino la confirmación de lo que ya han escuchado.
  5. Fase 5 (Mes 2): Lanzamiento Público. Realizar el lanzamiento oficial de la nueva especialización, apoyándose en testimonios de clientes clave que ya están satisfechos con la transición.

Este enfoque convierte un momento de riesgo en una oportunidad para reforzar la lealtad. Al tratar a sus clientes como socios en su evolución, demuestra que su negocio, aunque más especializado, sigue centrado en ellos.

¿Encuestas vs landing page vs prototipo: qué método de validación elegir primero?

Tener una nueva propuesta de valor brillante sobre el papel no sirve de nada si el mercado no responde. Antes de invertir tiempo y dinero en desarrollar completamente un nuevo servicio o cambiar toda su marca, es crucial validar sus hipótesis. La validación no es más que un experimento para responder a una pregunta: «¿Hay un grupo de personas reales dispuestas a pagar por esta solución a su problema?». La elección del método de validación correcto depende de lo que quiera aprender y de los recursos que disponga.

No todos los métodos son iguales. Las encuestas cualitativas son excelentes para una primera toma de contacto. Le permiten hablar con clientes potenciales y profundizar en sus frustraciones y deseos. Son baratas y rápidas, ideales para validar el problema. Sin embargo, lo que la gente dice y lo que hace a menudo difiere. Aquí es donde entra la landing page de «humo» (smoke test). Se crea una página de ventas para el servicio que aún no existe y se mide el interés real a través de registros o pre-pedidos. Esto valida la demanda. Por último, un prototipo o servicio «concierge» va un paso más allá: entrega la solución de forma manual a un pequeño grupo de clientes para validar el proceso completo y el precio.

Para un empresario español, especialmente en sectores regulados como el financiero, es vital considerar también el riesgo regulatorio y los costes asociados a cada método, tal y como detalla la CNMV en sus guías.

La siguiente matriz puede ayudarle a decidir qué método utilizar primero, basándose en su coste, tiempo, riesgo regulatorio y objetivo de aprendizaje:

Matriz de decisión: métodos de validación para servicios financieros
Método Coste Tiempo Riesgo regulatorio CNMV Mejor para validar
Encuestas cualitativas Bajo (0-100€) 1 semana Nulo Interés inicial, pain points
Landing page ‘humo’ Medio (200-500€) 2-3 semanas Bajo (con disclaimers) Demanda real, conversión
Servicio Concierge manual Bajo (tiempo) 1-3 meses Nulo (clientes reales) Proceso completo, pricing
Prototipo software Alto (5.000€+) 3-6 meses Medio (requiere compliance) Escalabilidad, UX

El camino más inteligente suele ser secuencial: empezar con encuestas para afinar el mensaje, seguir con una landing page para medir la demanda, y si los resultados son positivos, ofrecer un servicio «concierge» a los primeros interesados. Esto minimiza el riesgo y la inversión.

Estudio de caso: Validación exitosa con Servicio Concierge

Un asesor financiero en formación, antes de invertir en costosas licencias y software, quiso validar su idea de «Planificación Fiscal para Expatriados en España». En lugar de construir una plataforma, ofreció el servicio de forma totalmente manual (con hojas de cálculo y reuniones por Zoom) a 3 clientes pioneros durante un trimestre. Este experimento de bajo coste le permitió confirmar tres hipótesis críticas: existía una demanda real (2 de los 3 clientes renovaron el servicio), el precio era correcto (1.500€/trimestre fue aceptado), y pudo definir los procesos clave. Con estos datos concretos, pudo justificar con confianza una inversión de 10.000€ en automatización y en la obtención de la certificación MIFID II necesaria.

Puntos clave a recordar

  • La diferenciación no es un eslogan, es la coherencia de todas las partes de su negocio (producto, precio, servicio, comunicación).
  • Copiar al líder es posicionarse como una alternativa inferior. El contra-posicionamiento busca explotar las debilidades estructurales del competidor.
  • Antes de lanzar, valide su nueva propuesta de valor con experimentos de bajo coste para confirmar que existe una demanda real dispuesta a pagar.

¿Ventaja competitiva real vs descuento temporal: cuál construye un negocio a largo plazo?

En la búsqueda de clientes, la tentación más inmediata es el descuento. Un «20% de descuento para nuevos clientes» puede generar un pico de ventas, pero es una estrategia adictiva y destructiva a largo plazo. Un descuento temporal no es una ventaja competitiva; es una táctica de alquiler de clientes. Tan pronto como la oferta desaparece o un competidor ofrece un 25% de descuento, ese cliente se va. Construir un negocio sobre esta base es como construir una casa sobre arena.

Una ventaja competitiva real y defendible es una característica intrínseca de su negocio que es difícil o costosa de imitar por la competencia y que es valorada por sus clientes. No se basa en el precio, sino en el valor. Puede ser una tecnología propia, un proceso de servicio al cliente excepcional, una marca con una autoridad incuestionable o un profundo conocimiento de un nicho. Esta ventaja es un activo que se aprecia con el tiempo, mientras que un descuento es un pasivo que erosiona el valor de su marca.

En sectores donde la confianza es primordial, como el financiero, un precio bajo puede incluso ser contraproducente y generar sospechas. Como bien apunta un experto del sector, el verdadero campo de batalla no es el precio, sino la claridad.

En finanzas, un precio bajo puede generar desconfianza. El verdadero ángulo es la transparencia de costes: mostrar exactamente qué paga el cliente y por qué.

– Carlos García Ciriza, Presidente de Aseafi, sobre estrategias de pricing en asesoramiento

Construir una ventaja competitiva sostenible, como la autoridad en un nicho, no es un sprint, sino una maratón. Requiere un plan deliberado y constante, un ciclo de autoridad que se retroalimenta. A continuación, un plan de acción para auditar y construir su propia ventaja competitiva.

Plan de acción: su auditoría de ventaja competitiva

  1. Puntos de contacto: Liste todos los lugares donde un cliente potencial interactúa con su mensaje (web, redes, emails, reuniones). ¿Su ventaja es visible en todos ellos?
  2. Inventario de mensajes: Recopile los mensajes clave que está emitiendo actualmente. ¿Hablan de características («hacemos X») o de beneficios transformadores («logrará Y»)?
  3. Análisis de coherencia: Confronte sus mensajes con los valores y la propuesta de valor que definió. ¿Hay contradicciones? ¿Promete personalización pero su proceso es 100% automatizado?
  4. Test de memorabilidad y emoción: Pida a un cliente de confianza que describa lo que hace en una frase. ¿Su respuesta coincide con su posicionamiento deseado? ¿Es genérica o única?
  5. Plan de integración: Identifique los 3 «agujeros» más grandes en su comunicación y establezca un plan trimestral para crear o adaptar contenido que los cubra y refuerce su autoridad.

¿Qué pasos concretos debo dar para lanzar mi negocio sin arruinarme en el intento?

Una vez definida y validada su estrategia de diferenciación, llega el momento de la verdad: la ejecución. Lanzar un negocio, incluso como autónomo, implica unos costes fijos que pueden generar vértigo. La clave para no arruinarse es la planificación y el minimalismo. No necesita la oficina perfecta ni el software más caro desde el día uno. Necesita un presupuesto de arranque que cubra lo estrictamente esencial para entregar valor a sus primeros clientes y sobrevivir los meses iniciales.

El coste de lanzar un negocio de servicios como autónomo en España ha de ser calculado con realismo. Lejos de los mitos del «emprendimiento a coste cero», las cifras iniciales son significativas. Según un análisis de costes para autónomos del sector financiero, los gastos mensuales durante los primeros meses pueden oscilar entre 700€ y 2.000€, dependiendo de las herramientas y seguros necesarios. Este colchón financiero es su pista de despegue; si es demasiado corta, el negocio no levantará el vuelo.

La optimización de costes no consiste en no gastar, sino en gastar de forma inteligente. Priorice los gastos obligatorios (cuota de autónomos, seguros) y los que impactan directamente en la calidad del servicio. Retrase todo lo que sea superfluo. Por ejemplo, en lugar de alquilar una oficina, empiece con un coworking por horas. En lugar de un desarrollo web a medida, utilice una plantilla profesional.

Para darle una visión clara, aquí tiene un desglose realista de los costes iniciales para un asesor financiero que empieza como autónomo en España en 2024, aprovechando las bonificaciones disponibles:

Desglose de costes iniciales para asesor financiero autónomo
Concepto Coste mes 1 Coste mensual año 1 Bonificaciones aplicables
Cuota autónomo 80€ 80€ (tarifa plana) Tarifa plana 12 meses
Seguro RC profesional 150€ 150€ No aplica
Certificación MIFID II 250€ (prorrateo) 0€ Formación bonificable
Software gestión (CRM) 50€ 50€ Planes startup
Coworking (por horas) 100€ 100€ No aplica
Asesoría/gestoría 150€ 150€ Pack nuevos autónomos
Marketing digital básico 100€ 100€ Kit Digital
TOTAL 880€ 630€ Ahorro: 40-50%

Como muestra la tabla, acogerse a ayudas como la tarifa plana para autónomos o el Kit Digital puede reducir drásticamente la carga financiera inicial. El objetivo es lanzar una Versión Mínima Viable de su negocio, que le permita empezar a facturar cuanto antes para que sea el propio negocio el que financie su crecimiento futuro, en lugar de su bolsillo.

Para asegurar un lanzamiento exitoso, es crucial tener claros los pasos y costes reales para empezar sin descapitalizarse.

Ahora que tiene la arquitectura, las herramientas y el presupuesto, el siguiente paso lógico es empezar a construir. Comience hoy mismo a aplicar estos principios para transformar su posicionamiento y convertir su negocio en la elección preferida de sus clientes ideales.

Escrito por Marta Ruiz Fernández, Marta Ruiz Fernández es consultora estratégica certificada en metodología Balanced Scorecard y especialista en planificación empresarial desde hace 12 años. Dirige su propia consultoría de estrategia para pymes en Barcelona, habiendo asesorado más de 150 empresas en procesos de definición estratégica, análisis competitivo DAFO y despliegue de planes de acción.